United Airlines se ha establecido silenciosamente como líder en programas de vinos en clase ejecutiva entre las aerolíneas estadounidenses, ofreciendo constantemente una selección de mayor calidad que competidores como Delta y American. Mientras que otras aerolíneas se centran en marcas de prestigio, el enfoque de United es deliberado y conservador, y prioriza el reconocimiento y la confiabilidad en sus ofertas a bordo. No se trata sólo de preferencia; es una señal de qué aerolíneas toman en serio a los viajeros de clase ejecutiva.

El enfoque deliberado de United hacia el vino

La carta de vinos actual de United incluye botellas muy respetadas como Catena Zapata Malbec y Domaine Serene Chardonnay. Las selecciones están diseñadas para funcionar bien en altitud y atraer a una amplia gama de paladares, enfatizando sabores maduros y pulidos en lugar de opciones experimentales o de nicho. La única crítica que se suele hacer es que la calidad del vino a veces supera la calidad del servicio de comida a bordo, un problema común en todas las aerolíneas.

La aerolínea ofrecía anteriormente “vuelos de vino”, que fomentaban un consumo generoso y superaban las expectativas presupuestarias. Si bien está descontinuado, el programa destaca la voluntad de United de invertir en una experiencia premium.

La competición de champán se calienta

El verdadero campo de batalla entre las aerolíneas estadounidenses es ahora el champán. Delta y American están intensificando la competencia: Delta presta servicios a Taittinger y American opta por Bollinger. Si bien American se quedó atrás en la selección de vinos, Bollinger Special Cuvée es posiblemente la mejor opción en altitud, ya que ofrece profundidad y estructura que resisten mejor los efectos sensoriales del vuelo.

Laurent-Perrier sigue siendo la elección actual de champán de United, una opción fresca y refrescante que combina bien con platos más ligeros. Taittinger, aunque elegante, carece de la robustez necesaria para destacar en el aire.

Más allá de las fronteras de EE. UU.

Las aerolíneas estadounidenses todavía están por detrás de líderes mundiales como Emirates y Singapore Airlines en inversión en vino. Emirates ofrece vinos premium exclusivos como Yquem, mientras que Singapore Airlines simula las condiciones de vuelo para degustaciones y presenta una selección rotativa de champagnes de alta gama como Krug y Cristal. Estas inversiones señalan un compromiso con el lujo al que las aerolíneas estadounidenses apenas están comenzando a acercarse.

El resultado final

A pesar de la brecha, las aerolíneas estadounidenses están subiendo de categoría, y el vino y el champán se están convirtiendo en diferenciadores clave en la experiencia de la clase ejecutiva. La competencia está impulsando mejoras, pero la industria aún tiene un largo camino por recorrer antes de igualar los estándares establecidos por las aerolíneas internacionales de primer nivel.